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El liderazgo es una de las habilidades profesionales más demandadas por los empleadores, porque es la capacidad de influir e inspirar a los colaboradores para garantizar que se conseguirán los resultados deseados al encaminarlos al logro de objetivos en común.
Eso sí, el liderazgo es como una macrohabilidad, porque de esta derivan otras habilidades/cualidades que son imprescindibles para que un líder sea completo; por lo tanto, si consideras que eres un buen líder, las competencias correctas deben brillar en tu currículum.
Ahora bien…
¿Cuáles son esas habilidades de liderazgo que puedes incluir en tu CV? En este artículo te hablamos sobre las 15 que consideramos esenciales en el mercado empresarial.
¡A por ello! ✔
1. Trabajo en equipo
Si una persona no puede trabajar en equipo, no se le puede llamar líder, porque esta es la habilidad más importante que debe desarrollar para ser capaz de liderar un equipo humano.
El trabajo en equipo implica conseguir una adecuada coordinación y colaboración entre un grupo de personas; para ello, es vital que el líder sea capaz de integrarse a su equipo.
Cuando se trabaja en equipo es más probable alcanzar objetivos concretos, favorece la productividad y la motivación. Sin duda, los resultados son más eficaces.
2. Comunicación
Por supuesto que un buen líder ha de saber comunicarse con su equipo para trabajar en conjunto por un mismo fin, darle instrucciones precisas, escucharle, atender sus dudas…
Por lo que la habilidad comunicativa es una de las más importantes de un buen líder, es el pilar de sus acciones, la base de relaciones de trabajo saludables y armoniosas.
Y es que una buena comunicación asegura que la información sea comprendida de forma clara y precisa, además de que evita malentendidos que puedan ocasionar conflictos que, a su vez, puedan comprometer los resultados de la empresa, afectando el clima de trabajo.
3. Resolución de problemas
Los problemas están a la orden del día en una empresa, por eso, un buen líder ha de saber resolverlos de forma eficiente para garantizar que su equipo de trabajo progrese a un ritmo adecuado, sin contratiempos y manteniendo el foco en los objetivos organizacionales.
Esto no quiere decir que un líder exitoso es el que nunca ha afrontado problemas, que su camino ha sido lineal. Por el contrario, los problemas son parte del proceso, pueden surgir de forma repentina, es válido; así que un buen líder es capaz de sortear los obstáculos correctamente para evitar que interrumpan prolongadamente el trabajo de su equipo.
4. Toma de decisiones
Los problemas, los planes, las estrategias, las acciones… En fin, para alcanzar un objetivo se deben tomar decisiones, algunas que pueden tomarse con calma y tiempo, mientras que otras deben ser sobre la marcha, con efecto inmediato para mantener el ritmo de trabajo.
De modo que como líder debes tener la capacidad de tomar decisiones estratégicas a favor de los objetivos establecidos, considerando los pros y contras de cada una de las decisiones. Para esto, debes basarte en tus conocimientos y experiencia, no en tu intuición.
5. Pensamiento crítico
Analizar, comprender y evaluar cada uno de los procesos organizacionales también es una competencia fundamental en un buen líder, ya que va de la mano con la toma de decisiones, puesto que es lo que garantiza que las decisiones realmente estarán encaminadas a lograr los objetivos pautados previamente, esto es pensamiento crítico estratégico.
Básicamente, este concepto permite a los líderes usar sus conocimientos para afrontar los retos diarios y las situaciones complejas de su trabajo, actuando con estrategia.
6. Empatía
Ser capaz de reconocer, validar y respetar las emociones de cada individuo que conforme el equipo de trabajo también es una habilidad vital para ejercer un buen liderazgo.
Esta competencia profesional va de la mano con la comunicación, que es un pilar fundamental en el liderazgo, pues, además de dar instrucciones grupales, también será necesario mantener una comunicación individual personalizada con cada empleado.
Cada trabajador tiene preocupaciones, necesidades, problemas, miedos y expectativas particulares relacionadas con su trabajo; así que si se siente escuchado, comprendido y atendido sinceramente, aumentará su compromiso y, por ende, su productividad laboral.
7. Gestión del cambio
El mercado empresarial es voluble, nada es seguro, la economía es volátil, la tecnología demanda cambios acelerados, así que todo puede cambiar de la noche a la mañana.
Por ende, es necesario que el líder sepa adaptarse a las circunstancias de forma rápida y eficaz, tomando medidas inmediatas para garantizar resultados óptimos para la empresa.
Esto es precisamente la gestión del cambio, la capacidad de adaptarse constantemente a nuevas realidades sobre las que no se tiene el dominio suficiente como para detenerse, siendo la adaptación la única solución para mantenerse activos en el mercado.
8. Visión estratégica
Un buen líder debe ser capaz de mirar hacia el futuro de forma estratégica, ideando nuevos planes para que la empresa prospere, teniendo en cuenta sus objetivos organizacionales.
Para esto, debe saber establecer prioridades, metas y acciones a corto, mediano y largo plazo, siendo capaz de hacer una planificación estratégica y eficiente. Por supuesto, es esencial que también logre alinear e integrar a todos los miembros del equipo a este mismo propósito.
9. Delegar
El hecho de que seas un líder no implica que debas encargarte de todas las tareas, porque el margen de error humano, en este caso, es sumamente elevado por la sobresaturación de actividades. Es aquí donde delegar se vuelve necesario para conseguir mejores resultados.
Además de suponer un alivio, un buen líder confía en su equipo de trabajo, es capaz de asignarle las tareas correctas a cada integrante teniendo en cuenta su perfil (conocimientos, habilidades, puesto de trabajo, cualidades, etc.), cediéndole cierto grado de autonomía, brindando asistencia y supervisión, pero sin que esto le cause incomodidad al empleado.
Un buen líder no es el que dice que puede con todo, porque no es así; un buen líder es el que sabe que necesita cooperación de su equipo para lograr resultados efectivos.
10. Escucha activa
Esta habilidad va de la mano con la comunicación, porque un líder debe estar dispuesto a escuchar a sus colaboradores, sean comentarios, opiniones, ideas, quejas, etc.
Y, para lograr esto, también debe ser capaz de efectuar las preguntas que le permitan conseguir información clara y precisa, así podrá mejorar la situación de cada empleado en la empresa, conectar mejor con él y, claro, favorecer su productividad y compromiso.
11. Confianza
Lo reiteramos de nuevo: un buen líder debe confiar en su equipo y demostrárselo, el primer paso es a través de la delegación de tareas y autonomía; a su vez, también debe inspirar confianza como para que los colaboradores se acerquen a comentarles sus inquietudes sin temor, por eso es que la escucha activa y la empatía son habilidades tan importantes.
Y es que cuando hay confianza, los trabajadores son capaces de dar un paso al frente de forma voluntaria, porque se siente a gusto, comprendidos y tomados en cuenta, así que trabajan de forma eficiente y motivada, adoptan un objetivo en común, asumen riesgos, cooperan entre sí, se comunican y piensan de forma estratégica.
Sí, la confianza es la base de un buen liderazgo.
12. Coordinación y gestión
Un líder también debe ser capaz de coordinar y gestionar todo lo que conlleva su trabajo, desde controlar los tiempos y los recursos hasta coordinar las acciones y los equipos. Todo esto supone mayor organización y planificación, lo que se refleja en mejores resultados.
Si un líder transmite capacidad para coordinar y gestionar, todo el equipo estará dispuesto a mantener un mejor control de sus tareas y responsabilidades, porque se enseña con el ejemplo.
13. Motivación
Motivar e inspirar a los trabajadores también es una habilidad clave en un buen líder, porque mientras más satisfechos y comprometidos estén los empleados, mayor y mejor será su rendimiento, es un ganar y ganar (empresa - colaborador). Esta es una tarea primordial.
Además, es importante reconocer y recompensar a los trabajadores, ofrecer oportunidades de desarrollo personal-profesional, fomentar un clima laboral positivo, otorgar flexibilidad laboral, brindar críticas constructivas con respeto y animarles, principalmente.
Esto se logra poniendo en práctica otras de las habilidades anteriores, como comunicación, escucha activa, confianza, delegación de tareas, trabajo en equipo, empatía, entre otras.
14. Respeto
Un líder exitoso respeta a sus colaboradores, reconoce su valor, acepta los puntos de vista diferentes, no emite prejuicios, comunica con las palabras y el tono adecuado.
Ser líder no implica hacer lo que quieras y pretender que tus colaboradores te respetarán por el simple hecho de que te han denominado el ‘líder’ del equipo; porque el respeto no se impone con el cargo, no es automático, no se logra de la noche a la mañana, se gana poco a poco con acciones diarias, con confianza, con ceder autonomía, con saber escuchar.
En pocas palabras, si respetas, serás respetado, porque el respeto es recíproco.
15. Responsabilidad
Un líder puede permitir que sus colaboradores tomen las riendas de un proyecto porque confía en ellos, sin embargo, esto no significa que se desprende de su responsabilidad.
Como líder debes tener claro y presente que cuando delegas funciones, tareas y autonomía no delegas la responsabilidad del puesto, esta siempre recaerá sobre tus hombros, porque eres la cabeza del equipo, así que debes asumir la responsabilidad que esto implica.
Por lo tanto, siempre debes apoyar a tu equipo y tomar el mando cuando la planificación no se esté cumpliendo o cuando surjan problemas, esto no quiere decir que entorpecerás o vigilarás continuamente su trabajo como señal de desconfianza; por el contrario, transmite tu compromiso y profesionalismo al estar al tanto de tus responsabilidades.
En resumen…
Como ves, un líder debe reunir una serie de habilidades interpersonales, principalmente, para merecer esta distinción que es tan importante para una empresa hoy en día.
Si bien hay muchas competencias profesionales claves en un buen líder, aquí nos enfocamos en describir las destrezas que consideramos primordiales y ‘obligatorias’ para que el trabajo de influir sobre otras personas sea en beneficio de la empresa, sin descuidar el valor humano que tiene cada uno de los empleados que conforma el equipo de trabajo.
Por supuesto, la sinceridad es la base, incluye en tu currículum las habilidades que posees. ✔
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