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En esta guía te mostramos paso a paso cómo redactar tu carta, cómo hablar con tu jefe o RR.HH. y te damos una plantilla editable para que tu solicitud sea clara, efectiva y bien recibida.
Puntos Importantes:
- Solicitar un cambio de ubicación laboral es una decisión estratégica que debe comunicarse con claridad, respeto y motivos bien fundamentados.
- La carta debe ser breve, humana y profesional, incluyendo razones personales o de salud, pero también beneficios concretos para la empresa.
- Es fundamental adjuntar documentación de apoyo (certificados, informes, PDF) y seguir el procedimiento establecido por el órgano o sistema interno.
- Hablar con tu jefe o RR.HH. requiere preparación, tono adecuado y conocimiento del proceso para evitar errores o malentendidos.

Ejemplo completo de modelo de carta de reubicación del puesto de empleo
Esta carta está pensada para ser clara, directa y al mismo tiempo sólida desde el punto de vista laboral y humano. Incorpora conceptos clave como traslados de puesto, condiciones laborales, salud, orden interno y mucho más.
Solo tienes que personalizar los campos entre corchetes y revisar que se ajusta a tu situación actual y al estilo de comunicación de tu empresa.
Cómo redactar una carta de solicitud de ubicación laboral
Pedir un cambio de ubicación laboral no es solo rellenar un papel o enviar un correo. Es un momento clave en tu carrera: estás tomando las riendas de tu vida profesional y personal, buscando ese equilibrio que todos merecemos.
En esta sección te vamos a enseñar cómo redactar una carta de solicitud que suene auténtica, profesional y humana.
1. Pensar antes de escribir: la clave de los trámites
Quizás estás atravesando una reforma en tu situación familiar, te has visto afectado por un accidente reciente o simplemente has detectado que otra localidad se adapta mejor a tu día a día y te permitiría rendir mejor. También puede que haya surgido una oportunidad de colaborar más estrechamente con otros miembros del equipo, facilitar entregas de documentos o reforzar informes clave desde una posición más estratégica.
Sea cual sea el motivo, la clave está en conectar tu necesidad personal con el beneficio que puede obtener también tu empresa. Es ese punto medio, entre la honestidad y la visión estratégica, el que hará que tu solicitud destaque.
2. Empieza con alguna introducción clara y directa
La introducción es clave: debe dejar claro el tipo de solicitud que haces, de forma directa, ordenada y profesional. Evita rodeos, ve al grano con elegancia.
Puedes hacer referencia a plazos concretos, acuerdos previos, informes de desempeño o datos relevantes que apoyen tu petición. Este texto puede ir acompañado de un PDF con documentación adjunta, o bien formar parte de un proceso formal de revisión del equipo o votación interna.

3. Humaniza tu mensaje: cuenta tu historia misma
Incluir un fragmento de tu historia ayuda a generar empatía y comprensión. En muchas ocasiones, un cambio de localidad no solo es una elección profesional, sino una necesidad de adaptación vital.
Puede que necesites estar más cerca de tu núcleo familiar, que tu pareja haya sido trasladada recientemente, o que simplemente estés buscando un entorno donde puedas equilibrar mejor tu vida personal y profesional. Contarlo con cercanía no te resta profesionalidad; al contrario, aporta contexto y sentido a tu solicitud.
4. Expón cómo el cambio también beneficia a la empresa
Una solicitud de este tipo cobra más fuerza cuando demuestra que no solo responde a una necesidad personal, sino que también está alineada con los intereses de la organización. Es aquí donde entra en juego tu capacidad de análisis y visión a medio plazo.
Tal vez tu traslado te permita estar más cerca de un cliente estratégico, mejorar la gestión documental o los tiempos de entrega de proyectos, o facilitar la supervisión de informes y trabajos en una oficina clave. También puede ser que aportes conocimiento del terreno en una nueva localidad, o que tu motivación aumente gracias al cambio de entorno.
5. Cierra con respeto, disposición y buena vibra
El cierre de tu carta debe dejar una impresión positiva, de colaboración y respeto. Aquí es donde se transmite tu disposición al diálogo y tu apertura a cualquier revisión o propuesta de adaptación que pueda surgir.
Agradece el tiempo dedicado a leer tu solicitud, muestra disponibilidad para ampliar información, aportar documentos adicionales o mantener una reunión si fuera necesario. Este último párrafo, aunque breve, es un texto clave que define el tono con el que se recibe tu mensaje.
Tips para hablar con tu jefe o RR.HH. sobre la solicitud
Presentar una solicitud de ubicación laboral no es solo un trámite, también implica una conversación importante. Ya sea que estés hablando con tu responsable directo, con Recursos Humanos o con la dirección del centro, la forma en que comuniques tu situación marcará la diferencia.

Aquí van algunos consejos clave para abordar la conversación con seguridad y claridad:
- Prepara los documentos: lleva contigo cualquier artículo, informe, certificado o documento que respalde tu situación. Aporta claridad y demuestra orden en tu planteamiento.
- Sé claro con tu motivo: ya sea por razones personales, una reincorporación tras baja médica, cambios en tu puesto de trabajo o situaciones que afecten tu vida profesional, explica todo con carácter y profesionalidad, sin dramatismos.
- Haz referencia al procedimiento: menciona que conoces el procedimiento interno o el reglamento aplicable (si existe). Esto genera confianza y demuestra que respetas la estructura del centro o empresa.
- Anticipa posibles preguntas: si tu solicitud afecta al mismo equipo, turno o funciones, ofrece soluciones. Puedes sugerir una reserva temporal de recursos, la adaptación del puesto o una revisión del reparto de tareas.
- Mantén la calma y el respeto: aunque algunos temas pueden ser delicados (como una reubicación tras un suceso personal o un desacuerdo), mantener el tono profesional refuerza tu posición.
Recuerda que, aunque tu caso sea único, en el mundo laboral muchos empleados han pasado por situaciones similares. Ser directo/a pero considerado/a es la mejor forma de avanzar hacia un acuerdo justo y bien gestionado.