Crea tu currículum en 15 minutos
Nuestra colección gratuita de plantillas de CV diseñadas por expertos te ayudará a destacar entre la multitud y acercarte un paso más al trabajo de tus sueños.

Por eso, es importante que desde el primer momento que inicias una nueva búsqueda laboral pongas en práctica estrategias que te permitan controlar tus emociones de forma saludable.
En este artículo exploramos cómo manejar las emociones durante la búsqueda laboral con consejos prácticos.
Puntos claves
- Las emociones pueden influir positiva o negativamente sobre la búsqueda laboral. Es inevitable no sentir emociones positivas o negativas en este proceso, pero lo que sí puedes hacer es aprender a gestionarlas para que no afecten tus objetivos.
- La búsqueda de trabajo es un proceso imperfecto, no puedes controlar todo lo que suceda, así que enfócate solo en lo que sí está bajo tu control.
- Las técnicas de relajación te ayudan a gestionar las emociones difíciles y recuperar el estado de calma.

Identifica las emociones que estás sintiendo
Cada emoción que sentimos tiene una razón de ser, aparece por algo que sucede o sucederá. En el caso de la búsqueda de empleo, el proceso en sí puede ser muy desafiante y, hasta cierto punto, abrumador; así que es normal experimentar emociones intensas.
Por lo tanto, el punto de partida de la gestión emocional es que identifiques qué estás sintiendo y qué lo está provocando. Por ejemplo, si tienes miedo, pregúntate cuál es el motivo. Tal vez es el síndrome del impostor haciéndote dudar de tus habilidades profesionales.
El punto es que debes identificar tus emociones y sus detonantes para poder gestionarlas correctamente.
Enfrenta cada emoción con una solución
Como las emociones son impredecibles en la búsqueda laboral, es vital generar un ambiente emocional positivo y seguro para no obstaculizar el proceso.
Supongamos que estás experimentando emociones intensas, como ansiedad, en tu búsqueda de empleo, porque quizás temes no encontrar trabajo, tus expectativas están muy altas, te da miedo ser rechazado, temes no saber responder a las preguntas de la entrevista, etc.
Así que una vez que identifiques tus emociones, cambia el enfoque para hacer las paces con esa emoción y mantener una actitud positiva durante todo el proceso.
Se trata de afrontar la emoción buscando una solución a la situación que está ocasionando cada emoción intensa. En pocas palabras, transformar un enfoque negativo en un enfoque positivo.
Evita ponerte expectativas muy altas
Esto solo genera una presión innecesaria, porque la búsqueda de empleo ya genera presión como para que te sumes más estrés y ansiedad al establecerte expectativas demasiado altas. No es nada motivador, por el contrario, esto puede obstaculizar el proceso.
Las expectativas deben ser realistas, no buscar el perfeccionismo. Y la mejor forma de establecerte expectativas acordes a la realidad es investigando tu mercado profesional para conocer datos como los empleos más demandados y los salarios aproximados, sobre todo.
Con base en esta información puedes establecer expectativas argumentadas al buscar empleo.

Establécete metas realistas
Está bien ser ambicioso, aspirar a grandes oportunidades profesionales, pero también es importante ser realista, no fijarse metas difíciles de alcanzar, porque es aquí donde nace la frustración y la desmotivación.
Por eso, toma en cuenta tus conocimientos, habilidades y experiencia al fijar tus metas al buscar trabajo. Ten aspiraciones, sí, pero que no sean inalcanzables en este momento.
Practica técnicas de relajación
Meditación, respiración profunda y visualización positiva son algunas de las técnicas de relajación que pueden ayudarte a disminuir los niveles de ansiedad, estrés, ira y frustración. A su vez, te generan calma, así que conviértelo en una rutina para mejorar tu inteligencia emocional.
Cuando sientas que una emoción intensa está obstaculizando tu búsqueda de empleo o te ha paralizado, practica las técnicas de relajación para recuperar la serenidad.
Celebra los pequeños logros
Cada avance en el proceso de tu búsqueda de empleo, celébralo. El reconocimiento propio es una de las habilidades sociales más importantes en un profesional, así que practícalo, es automotivación.
Por ejemplo, si aplicaste a cinco anuncios de trabajo hoy, celébralo; si lograste agendar una entrevista de trabajo en el mes, celébralo; si recibiste una oferta de empleo en el mes, celébralo; si hiciste networking este mes, celébralo. Por más 'pequeño' que sientas que es el logro, celébrate.

Refuerza tu autoconfianza
Desarrollar el síndrome del impostor es muy común en el proceso de búsqueda de empleo, enfréntalo reforzando tu confianza, recordando comentarios positivos que te hayan hecho en el pasado exjefes, colegas y/o compañeros de trabajo. ¡Que lo bueno sume más!
Puedes hacer una lista con todos esos comentarios positivos y cuando sientas que tu ánimo está decayendo, cuando no te sientas capaz de afrontar un puesto de trabajo por miedo, lee estos comentarios con un tono de voz fuerte, sin titubear, mirándote en el espejo.
No te obsesiones con la búsqueda de trabajo
Trata de desconectarte del tema laboral, aunque te cueste. Cultiva tus pasatiempos favoritos, sal con amigos o haz alguna actividad que te relaje.
Recuerda que tu estado de ánimo influye en tu búsqueda de trabajo, pudiendo ser positiva o negativamente, tanto al aplicar a empleos como en la entrevista laboral. Por tanto, dedica tiempo a actividades que te llenen de alegría y energía.
Enfócate en lo que puedes controlar
En la búsqueda de trabajo no todo depende de ti. El hecho de que no consigas un empleo no quiere decir que no seas bueno para la vacante; que un reclutador no responda a tu solicitud o no te llame después de la entrevista no significa que eres el problema.
Hay muchas razones por las que no obtienes un empleo. Así que enfócate únicamente en las situaciones que puedes controlar, lo que está bajo tu dominio, como tu actitud, formación profesional y habilidades.

En conclusión…
La búsqueda de trabajo no define ni tu valor como persona ni tu valor profesional. Sentir nervios, miedo, ansiedad, estrés, incertidumbre, optimismo, alegría… Es completamente normal, es una respuesta automática de tu cuerpo ante un suceso desconocido.
No trates de evitar estas emociones, es imposible. Concéntrate en aprender a gestionarlas eficientemente, a no permitir que entorpezcan ni el envío de tu CV ni tu primer encuentro con el área de recursos humanos, porque tener un buen estado de ánimo es vital para obtener buenos resultados.