Crea tu currículum en 15 minutos
Nuestra colección gratuita de plantillas de CV diseñadas por expertos te ayudará a destacar entre la multitud y acercarte un paso más al trabajo de tus sueños.
Si es necesario, no dudes en negociar un contrato de trabajo para conseguir que los términos se ajusten a tus necesidades y expectativas. Cuando hagas esto, tienes que ser claro y, al mismo tiempo, profesional. Aunque sea la primera vez que realices esta negociación, puedes tener éxito.
Te animamos a seguir leyendo ya que aquí descubrirás cómo hacer una negociación de contrato efectiva. Para ayudarte a lograrlo, te facilitaremos estrategias prácticas y puntos importantes que debes aplicar.
¿Qué es negociar un contrato de trabajo y por qué realizarla?
El proceso de negociar un contrato de trabajo consiste en discutir y llegar a un acuerdo sobre las condiciones bajo las que trabajarás en una empresa. Por eso, en él participas tú y un representante de la compañía. En los aspectos que se tratan en la conversación están incluidos el salario, beneficios, responsabilidades, horarios y más.
La importancia de hacer una negociación se basa en que con ella garantizas que las condiciones de tu nuevo empleo sean justas y beneficiosas. Esto debe presentarse no solo desde tu perspectiva, sino también desde la de la empresa.
Cuando te aseguras de que las condiciones con las que inicies tu trabajo sean favorables, te sentirás satisfecho. También establecerás una relación transparente con tu empleador desde el inicio.
Pasos a seguir para la negociación de tu contrato laboral
Una vez que leas tu contrato de trabajo y hayas determinado qué aspectos te gustaría cambiar, tienes que hacer la negociación. Para ella, tienes que establecer una estrategia óptima, estar bien informado y demostrar que eres proactivo.
Para ayudarte a prepararte apropiadamente, a continuación, describimos los pasos que debes seguir:
1. Conoce bien a la empresa
Para hacer una negociación ideal, tienes que investigar muy bien a la compañía, así podrás presentar argumentos que sean convincentes. Entre los aspectos que debes investigar está la política salarial de la empresa, su cultura corporativa y los beneficios que suele entregar a sus empleados.
También te recomendamos enfocar tu investigación en el mercado laboral en el que se desempeñan los profesionales como tú. Uno de los aspectos a averiguar es la demanda que tiene el cargo, si esta es alta, tu poder para negociar será mayor. En cambio, si no es muy demandado, tienes que ser más estratégico.
2. Ten claro tus objetivos con la negociación y tus puntos fuertes
Para ir a la negociación con los representantes de la empresa que te ha hecho una oferta de trabajo, debes tener tus objetivos claros. Ten en mente un salario exacto y establece un monto mínimo que estés dispuesto a aceptar. Además, determina qué beneficios son fundamentales para ti.
Para que sepas cuánto poder de negociación tienes, conoce bien tus habilidades. Si los representantes valoran tus conocimientos y competencias técnicas, estarán más dispuestos a cambiar ciertos aspectos con el fin de mantenerte en sus empresas.
3. Escoge una buena estrategia de negociación
La manera en la que abordes la conversación es clave para que la negociación fluya de manera óptima. Lo primero a hacer es seleccionar el momento ideal para hacer la negociación, puede ser en la entrevista final que se realiza después de recibir tu oferta de trabajo.
Antes de expresar que te gustaría hacer algunos cambios en el contrato, habla sobre algo positivo. Esto puede ser, por ejemplo, la buena reputación de la empresa y el entusiasmo que sientes por comenzar a trabajar en ella.
El que recurras a la negociación no significa que tienes que obtener todo lo que deseas. Más bien, en una buena estrategia se incluye el entender las necesidades de la empresa y ser flexible para llegar a un punto que sea conveniente para ambas partes.
4. Crea argumentos sólidos
Para que haya más posibilidades de que se hagan cambios en el contrato, tienes que tener argumentos sólidos. Por ejemplo, si quieres un mayor salario, debes mostrar los promedios salariales para tu puesto y en el área en el que trabajas.
Cuando presentes tus argumentos, también es fundamental que demuestres confianza en ti mismo y en lo que ofreces. Tienes que ser equilibrado, pues no es válido que hagas la negociación con exceso de confianza.
5. Ten listas las alternativas
Estas se presentan cuando los empresarios no están dispuestos a ceder a todos los cambios que deseas en tus condiciones laborales. Para elaborar las alternativas, ten en cuenta lo que has averiguado sobre la empresa. Estas deben adaptarse a ti y al empleador.
El que estés dispuesto a aceptar alternativas demuestra no solo que eres flexible, sino también que tienes una buena capacidad de persuasión.
Los errores que debes evitar cuando negocies un contrato
Si cometes un error al negociar el contrato de tu nuevo trabajo, las consecuencias pueden ser significativas. Por eso, enlistaremos lo que debes evitar:
- Realizar la negociación con un tono agresivo o de otro tipo que demuestre falta de profesionalismo.
- Aceptar los nuevos términos sin que se confirme su aplicación a través de la redacción de un nuevo contrato.
- Insistir en lo que tú quieres, más bien, debes saber cuándo no se llegará a ningún acuerdo y dejar de negociar.
- Tratar de convencer al empleador hablando de situaciones personales que no tengan ninguna relación con el trabajo.
Los aspectos a tratar al negociar un contrato de trabajo
En un contrato de trabajo están establecidas las condiciones bajo las que los empleadores contratan a los profesionales. Por lo tanto, es un documento fundamental al ser contratado, pues permite establecer una base sólida para la relación entre el empleador y el empleado.
Según el trabajo que se haya obtenido, existen varios tipos de contratos, los más comunes son el indefinido, el de tiempo determinado, a tiempo parcial y el contrato temporal. También existen los contratos de formación, los que se hacen como freelancers o contratistas y los de prestación de servicios.
Independientemente del tipo de contrato que usen las empresas, es crucial que en este se establezcan aspectos como la descripción del cargo, la fecha de incorporación a la empresa y más. Cuando estés leyendo el contrato en tu nuevo empleo, asegúrate que se incluyan los siguientes puntos:
Modalidad y duración del contrato
La modalidad del contrato es un punto clave, así que tiene que quedar claro desde el principio. También se debe aclarar cuál es la duración del contrato, en él se debe especificar cuál es el mínimo de tiempo que se espera que permanezcas en la empresa. En este caso, es válido incluir una cláusula de prolongación.
Cuando en el contrato se trate el punto sobre la duración de la relación laboral, es necesario que se diga si la empresa pide que se complete un período de prueba. Si esto se hace, se incluyen datos como la duración de dicho período y las expectativas que tiene el empleado.
Salario
La remuneración que recibirás es uno de los puntos más importantes de tu contrato de trabajo, así que el empleador tiene que ser muy específico cuando lo aclare. Además de especificar el monto que te pagará, se tienen que incluir la cantidad de pagos que se harán al mes y el período de cobro.
Al ser uno de los aspectos más relevantes, tienes que enfocarte en él y, si es necesario, negociarlo porque será muy difícil obtener un aumento mientras seas un empleado nuevo. Para asegurarte de hacer una buena negociación de tu salario, tienes que investigar los rangos salariales para tu profesión para el puesto de trabajo y la región.
Cuando haces la investigación que mencionamos en el párrafo anterior, tendrás una buena base para negociar tu sueldo y justificar la solicitud de que este sea aumentado en el contrato. Una vez que se establezca un salario que sea conveniente para el empleador y, por supuesto, para ti, te puedes enfocar en aspectos como los siguientes:
- Revisiones anuales de tu sueldo.
- Aumentos basados en tu desempeño.
- Oportunidades de incremento salarial.
Bonificaciones y beneficios adicionales
Este es un aspecto que completa la retribución que recibes por parte de la empresa y por motivo de tu trabajo. La razón por la que es importante que formen parte de los elementos analizados en tu contrato laboral es porque las bonificaciones y otros beneficios adicionales complementan tu salario de manera significativa.
Entre los beneficios adicionales a tu salario que es válido que se incluyan en el acuerdo de trabajo están los bonos por desempeño, los pagos de comisiones y otros incentivos económicos. Cuando estés negociando tu contrato, tienes que hablar con el representante de la empresa sobre los siguientes puntos:
- Cómo se calculan.
- Cuándo se pagan.
- Las condiciones bajo las que se otorgan.
Condiciones del trabajo
En estas clases de condiciones están incluidos diversos elementos, desde las expectativas de tu rendimiento hasta la posibilidad de trabajo a distancia. Estos se deben incluir en los contratos porque ayudan a evitar malentendidos en el futuro y garantizan que tus expectativas y las de tu nuevo jefe estén alineadas.
Además de los mencionados en el párrafo anterior, otros factores incluidos en las condiciones del trabajo son las horas a trabajar cada día y semana. La idea es que se garantice la flexibilidad horaria y que se establezca la gestión que dará la empresa a las horas extras que trabajes.
Otros aspectos que se suelen incluir en las condiciones laborales establecidas en los contratos de trabajo son los siguientes:
- Carga laboral.
- Ambiente de trabajo.
- Revisión y cambios en las condiciones de tu empleo.
Días libres
En el caso de España, el Estatuto de los Trabajadores establece que el número de días de vacaciones al que cada empleado tiene derecho es de 30 como mínimo. Además de incluir estas vacaciones, es fundamental que en el contrato se aclaren los días libres por diferentes motivos, como enfermedad, maternidad o paternidad, por razones personales y más.
Los días libres deben aclararse en tu contrato de trabajo porque te permiten planificar apropiadamente tus vacaciones y entender tus derechos cuando necesites valerte de ellos. También se tiene que aclarar todo sobre los permisos especiales, algunos son las licencias por matrimonio, por voluntariado y por duelo.
Condiciones para el despido
Una de las partes clave de los contratos laborales son las circunstancias que se tienen que cumplir para que las empresas decidan poner fin a las relaciones laborales. Entre los despidos que existen la posibilidad que se presenten están los que tienen causas justificadas, los que no tienen una razón justificada y el despido colectivo.
Además de especificar las condiciones para el despido, en el contrato de trabajo se tiene que mencionar la obligación que tiene la empresa de dar preaviso al empleado. También se debe indicar si se entregará alguna compensación al profesional despedido.
Baja voluntaria
En este caso, se refiere a la salida de la empresa por voluntad propia. Con el objetivo de proteger los intereses de la empresa y los tuyos, es necesario que se deje claro todo lo relacionado con la baja voluntaria. En el contrato se tiene que establecer el tiempo de notificación previa y las consecuencias de no hacer un preaviso.
Además, se especifica cualquier procedimiento que sea necesario seguir dentro de la empresa. Entre los pasos a completar para valerte de la baja voluntaria es posible que se encuentre una entrevista con tu empleador. En ella se buscará entender los motivos por los que tomas la decisión de salir de la empresa.
Jubilación
En el contrato de trabajo incluso se habla sobre la jubilación, el objetivo de esto es garantizar una transición suave a esta nueva etapa. Los datos que se agregan al contrato sobre esto son la edad a la que te puedes jubilar, los beneficios que obtendrás y el proceso de transición.
Cuando estés analizando los convenios del contrato, tienes que verificar que todos los aspectos de la jubilación cumplan con lo establecido en el Estatuto de los Trabajadores y otras leyes correspondientes. Como en las demás partes del documento, tienes que discutir sobre ellos si quieres que sean convenientes para ti.
Cláusulas específicas
Las cláusulas de este tipo suelen tratar prácticas importantes o tener implicaciones legales que es crucial que conozcas al ser parte del personal de una empresa. En ellas se pueden incluir derechos, obligaciones y restricciones que es fundamental que comprendas antes de firmar tu contrato.
Si es necesario, es válido que busques asesoría para asegurarte de entender todo sobre cláusulas específicas en tu contrato de trabajo. A continuación, te mencionamos algunas de las más comunes:
- Cláusula de exclusividad.
- Acuerdo de no competencia.
- Cláusula de confidencialidad.
- Términos de rescisión de contrato.
- Derechos sobre la propiedad intelectual.
¡Encuentra ayudas de primera en Ejemplos-Curriculum!
La explicación detallada de cómo negociar tu contrato de trabajo es solo una de las ayudas que te damos. La principal es Ejemplos de CV, una sección que te animamos a visitar cuando tengas que escribir tu currículum. Seguro que en ella encuentras una guía perfecta para tu profesión que te muestre cómo escribir un CV que impresione al reclutador.
Para que tu currículum cumpla con las expectativas de los representantes de las empresas en la contratación de personal, entra a Plantillas de CV. Allí hay modelos que es posible editar. Todas las plantillas tienen diseños profesionales y elegantes, y se editan en nuestro AI Resume Builder. En él recibes sugerencias para mejorar el contenido del CV.
Por último, la sección Cartas de presentación está compuesta por artículos en los que te explicamos cómo escribir una carta que logre ser el complemento perfecto para tu curriculum vitae. Si haces una candidatura usando nuestras ayudas, lograrás recibir una oferta laboral en la que, si es necesario, negocies el contrato siguiendo nuestros consejos.
Conclusión
Para tener éxito en la negociación de un contrato de empleo, necesitas prepararte, tener claro tus objetivos y confianza en ti mismo. Cuando sigas los pasos adecuados y evalúes los aspectos más importantes, lograrás que el acuerdo que hagas con tu nuevo empleador sea satisfactorio para los dos.